Imagen de un perro enfermo en una clínica veterinaria

Moquillo canino: Protege a tu mascota de esta enfermedad mortal

El moquillo o distemper canino es una de las enfermedades más contagiosas y graves en perros, y casi siempre es mortal.

Esta enfermedad viral se contagia fácilmente de un perro a otro por medio de los aerosoles expulsados a través de la tos y los estornudos, de la orina y al compartir recipientes de agua y comida.

El virus del moquillo canino afecta principalmente a los cachorros y animales de la tercera edad, pero puede enfermar a cualquier perro, de cualquier raza y edad, sobre todo si tienen un sistema inmune debilitado. Ataca principalmente al aparato digestivo, al respiratorio y al sistema nervioso.

Es importante acudir al veterinario cuanto antes, pues los síntomas iniciales pueden confundirse con otros padecimientos y en tanto la enfermedad avanza, y tú perro se agrava.

Los primeros síntomas suelen ser malestar general, fiebre, pérdida de apetito y decaimiento del estado de ánimo de la mascota.
Después habrá signos más claros como tos, estornudos, dificultad para respirar, diarrea, vómito y deshidratación.
También pueden aparecer problemas oculares como lagrimeo, conjuntivitis o úlceras en las córneas además de engrosamiento de las almohadillas y la piel de la nariz.

Al agravarse la enfermedad aparecerán problemas neurológicos como temblores musculares, dificultad para caminar, calambres, tics nerviosos, parálisis, convulsiones y tal vez la muerte. El diagnóstico sólo puede confirmarse a través de estudios de laboratorio.

Hasta el día de hoy no existe una cura ni un tratamiento específico para tratar ésta enfermedad, por lo que el médico veterinario actuará de acuerdo a la condición de cada paciente, tratando de aliviar la sintomatología y procurando que el moquillo cause el menor daño posible al organismo del perro. Los animales que lo superan suelen tener secuelas por semanas, meses o de por vida.

Definitivamente siempre es mejor la prevención, por lo que es muy importante mantener a nuestro peludo al corriente en sus vacunas, desparasitado, con una alimentación adecuada y en buenas condiciones higiénicas.

Imagen de un perro pug, que está siendo vacunado
Aunque no es obligatoria, la vacuna contra el moquillo (distemper), ha ayudado a controlar ésta enfermedad a nivel mundial, por lo que es recomendable que forme parte del calendario de vacunación de tu mascota.

Consulta con tu veterinario de confianza sobre las vacunas adecuadas para tu mascota y sigue al pie de la letra sus indicaciones, sobre todo si tienes un cachorro, pues ellos NO deben convivir con otros perros hasta que tengan su esquema de vacunación completo.

La transmisión del virus es muy rápida, por lo que te aconsejamos tener mucha precaución cuando lleves a tu perro a lugares como estéticas caninas, pensiones u hoteles para mascotas, escuelas de entrenamiento o cualquier otro espacio donde convivan varios animales a la vez. Asegúrate de que son higiénicos y que piden como requisito la cartilla de vacunación al corriente. Finalmente debes saber que el moquillo No es un riesgo para el humano.

Imagen de cuatro perros cachorros comiendo del mismo plato
Los lugares donde conviven muchos perros a la vez y el compartir la comida y el agua son una de las formas más comunes de contagiarse del virus del moquillo canino.

Si lamentablemente tu perro llegara a enfermar de moquillo va a necesitar mucho de ti, de tus cuidados y de tu paciencia, pues si llega a perder movilidad, hay que ayudarlo a comer, a tomar agua, a defecar y orinar, a cambiarlos de posición para evitar llagas, etc. Pero si su estado de salud ya es muy grave, seguramente deberá permanecer internado en una clínica veterinaria. Vacunar es la mejor forma de prevenir la enfermedad. Cuida a tu mascota.

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