La importancia de elegir al médico veterinario adecuado para tu mascota

Elegir al médico veterinario que atenderá a tu perro o a tu gato no es cosa fácil. Debes considerar que no sólo se trata de aplicar vacunas y desparasitaciones, sino que también deberá atender las enfermedades o accidentes que eventualmente pueda sufrir tu mascota a lo largo de toda su vida. 

Antes que nada, es importante decir que el precio de la consulta no determina la eficiencia ni el conocimiento del veterinario; es decir, no porque pagues mucho dinero tu peludo va a ser mejor atendido y no porque te cobren un poco menos va a tener mala atención. 

Quizá deberás probar con varios médicos hasta que encuentres el que te brinde buen trato para tu mascota, honestidad, confianza y por supuesto que sea un profesional titulado. 

Cuando hablamos de buen trato para tu mascota nos referimos a la forma en cómo se relaciona el médico con tu peludo. Algunos veterinarios ni siquiera le hablan por su nombre, lo tratan con rudeza o no tienen mucha consideración ante el dolor físico que lleva el animal o ante el miedo que puede tener al acudir al consultorio. 

Con las visitas regulares al veterinario poco a poco te darás cuenta si es honesto. Desconfía de aquellos médicos que ante el más mínimo padecimiento le ponen suero y sugieren que se quede internado; de aquellos que siempre sugieren cirugías; de aquellos que cuando se necesita un estudio de laboratorio no te dan opciones y te obligan a realizarlo donde ellos te indican; de aquellos que no son capaces de atender una urgencia si no han asegurado su pago, aunque ya te conozcan como su cliente y de aquellos que tienen un letrero que dice: “Toda pregunta causa honorarios”, porque tenemos muchas dudas que aclarar en relación a la salud de nuestro amigo de cuatro patas. 

Cuando lleves a tu perro, a tu gato o a cualquier otro animalito a consulta pregunta todo lo que quieras sobre las vacunas que aplican a tu mascota; cuando lo llevas por alguna enfermedad y lo inyectan, pregunta qué medicamento le están aplicando y para qué sirve, si causa alguna reacción, qué cuidados debes tener, porqué pudo enfermar, en fin… todas las dudas que tengas al respecto. Es su obligación responderte. Si se molesta o te contesta de mala gana… quizá deberás seguir buscando al médico adecuado. 

Hay otros detalles que debes tener en cuenta. Observa un poco por el consultorio. Busca el título profesional del médico y revisa en el carnet de tu mascota y en las recetas que te dan, que aparezca su número de cédula profesional. 

Y sigue mirando… que las vacunas estén en refrigeración, que las jeringas que utilizan sean nuevas, que tengan instrumental esterilizado, que sea un lugar limpio,  etc. Todo cuenta. 

Finalmente, otro aspecto muy importante es que el veterinario esté dispuesto a atender urgencias, pues suele ocurrir que nuestro peludo enferma o sufra algún accidente en domingo o fuera de horario habitual de consulta y algunos médicos no responden en estos casos. 

Cuando encuentres al veterinario con el que te sientas a gusto ya no busques más. Acude siempre con él, cumple sus indicaciones, mantente al corriente con el calendario de vacunación y atento siempre a la salud de tu mascota. 

Tu perro vivirá entre 10 y 15 años; en el caso de los gatos quizá más, por lo que contar con un médico veterinario profesional y de confianza que lo atienda a lo largo de toda su vida es fundamental para asegurar la salud y el bienestar de tu mascota.